La Revolución Liberal ecuatoriana, liderada por Eloy Alfaro, buscaba modernizar el país y acabar con el dominio conservador y clerical. Vargas Torres se unió a las fuerzas liberales y se convirtió en un importante colaborador de Alfaro. Su lealtad a la causa liberal y su habilidad militar lo convirtieron en un elemento clave en diversas campañas.

Una de las acciones más destacadas de Vargas Torres fue su oposición a la dictadura de Ignacio de Veintemilla. Veintemilla, quien se había proclamado dictador en 1876, encontró una fuerte resistencia en las fuerzas liberales. Vargas Torres fue uno de los líderes militares que lucharon incansablemente contra el régimen dictatorial. Su compromiso con la causa liberal y su rechazo a la tiranía lo hicieron muy popular entre sus contemporáneos.

En 1883, durante una de las campañas militares contra el régimen de Veintemilla, Vargas Torres fue capturado por las fuerzas leales al dictador. A pesar de los esfuerzos de sus compañeros por liberarlo, fue llevado a Guayaquil, donde enfrentó un consejo de guerra. El 20 de marzo de 1887, Vargas Torres fue ejecutado, convirtiéndose en un mártir de la causa liberal.

El coronel Luis Vargas Torres es recordado como un héroe nacional en Ecuador. Su vida y su sacrificio simbolizan la lucha por la libertad y la justicia en una época de grandes convulsiones políticas. En su honor, varias instituciones y localidades llevan su nombre, perpetuando su memoria y su contribución a la historia ecuatoriana.